martes, 28 de junio de 2011

Besos sabor lluvia

Sostienes mi mano, con fuerza y empiezo a preguntarme si lo haces porque lo necesitas o porque te has acostumbrado...
Pienso, es momento de que te vayas. Regreso a casa pensando en ti, es momento de decir adiós, es momento de soltar tu mano, es época de lluvias, caminar solo y que mi mano solo ocupe un paraguas, las nubes se juntan de nuevo, mientras yo me separo, las nubes toman color mientras yo te pienso, las nubes se esponjas  mientras yo me desvanezco.
Es momento de caminar sola otra vez, la lluvia cae, y en mi cuerpo pequeños besos de consuelo empiezan a caer del cielo con la forma de una gota y con sabor a lluvia, me detengo a pensar en ti, es momento de que sigas tu camino sin mi, es momento de que cruces a tierra firme y dejes este mar de origami en el que me he convertido, es momento de que sigas al barco de papel que he construido para continuar tu viaje sin mi, quise seguir caminando pero los besos de lluvia confortan mis lágrimas, los besos de mi amante favorito.

lunes, 13 de junio de 2011

A través del espejo.

Que le paso a la niña de hablar pausado y moderado, a la pequeña de pocos amigos y solitaria... siempre con una sonrisa aunque no tuviera un motivo válido para tal acción, con ojos melancólicos y pies burbujeantes que querían ir a un mundo remoto donde nadie pudiera hacerle daño y molestar sus pensamientos absurdos.
Ya ha pasado un tiempo desde que no veo a la niña de ojos melancólicos y sonrisa sin motivos jugando solitaria a las muñecas, ya no he vuelto a ver a la pequeña niña con esperanzas de un mundo mejor. Me acerco al espejo y ya no puedo ver a la pequeña damita, solo veo a una mujer con ojos vacíos y sin razones para esperar algo de la humanidad. Sus pies no burbujean por ir a su mundo como los de la pequeña niña, ya han olvidado el camino, sus muñecas ya no hablan en su mente ahora solo pertenecen a una caja llena de polvo. Ya no veo a la niña que solía ver en este espejo, se ha perdido entre tanta solidad, entre las manos de aquellos que le han quitado su corazón.
He intentado ir a los sitios que la pequeña damita solía visitar, pero han perdido el brillo desde que ella no pisa con sus pies burbujeantes ese suelo estrellado, pero a ella ya no ya no la he vuelto a ver por este camino, solo puedo ver a esa mujer de piel marfil y ojos decaídos, con mirada ausente, ella intenta buscar a la niña de su infancia para devolver el corazón que le han arrancado.

sábado, 4 de junio de 2011

Chocolates y cigarrillos...



Eres viento que existe, pero no lo veo ni lo puedo tocar, evitando que te encuentre, evitando lo obvio y lo que es lógico, quizás tienes una aversión hacia lo desconocido, como yo. Me pregunto que clase de extraño eres, por que puentes han pasado tus pies, que flores han coloreado tus ojos, que sonidos has opacado, que rosas han tocado tus dedos, que notas de piano sueles tararear, que estrellas miras, que chocolate comes.
Mientras yo sigo aquí con los mismos zapatos, con la misma mirada vacía y el mismo corte de cabello preguntándome si algún día caminare por el mismo puente que tu o si algún día el viento me tocara de la misma manera que a ti. Solo sigo caminando a paso lento para ver si de tanto dar vueltas me encuentro contigo extraño, mirando atras de en vez, sigo esperando con las mismas esperanzas en la misma casa de siempre mirando por la misma ventana de siempre comiendo el mismo chocolate, mientras el humo de los cigarrillos distrae mi mirada desorientada y con ansiedad espero ver por la calle algo que no conozca y que con el tiempo si convierta en el extraño que estoy esperando desde hace tanto...
Sigo aquí en la misma casa en el mismo piso en la misma posición con el mismo chocolate y ese mismo humo de cigarrillos que no se extingue, y sigo como siempre, buscando con la mirada esperando a ese extraño caminando por la calle.

En estos dias.

Siempre intentando encontrar la inversa del viento, intentando ir a la marcha de las hormigas, tratando de saber mas que el viejo mar,  queriendo pintar traslucido las nubes grises, pretendiendo llenar el espacio entre las letras, queriendo superar lo imposible y romper lo posible, pretendiendo organizar el orden del caos, encontrandole el sentido a lo obvio.En esos dias intentaba buscar mi camino, pero nada me llevaba al puente correcto. aqui me encuentro entre hojas en blanco y lapiceros sin tinta, observando como los elefantes emigran hacia las gotas de lluvia. los fantasmas de mi mente hacen jugaretas a mis deciones perdidas y mis pensamientos se van de vacaciones con mi cordura vacia. intento detener al viento que va veloz en una carrera contra el arena del tiempo. En estos dias capturo tus sonrisas en mi camara sin rollo y las caracolas las guardan en su memoria, me detengo y pienso que en estos dias no hay nada como. . .